Tratar la gingivitis a tiempo: fundamental para evitar complicaciones
La gingivitis es una enfermedad periodontal que cursa con infección y dolor en las encías. Los primeros síntomas que indican que tu estado gingival no es óptimo, son el mal aliento, la irritación, el enrojecimiento y el sangrado de la encía.
Este problema de salud oral presenta una alta incidencia en la población mayor de 35 años. Dejarlo pasar puede derivar en complicaciones mayores, incluso la pérdida de piezas dentales.
Una gingivitis no tratada en sus primeras fases de afección puede ocasionar una periodontitis. Enfermedad que genera deterioro gingival y dental.
En este artículo vamos a informarte con detalle sobre las causas y los tratamientos de la enfermedad gingival. ¡Sigue leyendo nuestros consejos!
¿Cuándo debes empezar a tratar la gingivitis?
Si sufres alguno de los síntomas antes mencionados, no lo dudes: acude en cuanto te sea posible a tu centro dental de confianza. Que sea un problema habitual no elude su gravedad, necesitas un tratamiento personalizado.
En cuanto comiences a notar cualquiera de los síntomas normalmente asociados a la enfermedad gingival, debes ponerte en manos de un odontólogo. El primer paso para conocer el estado de tus encías es la evaluación y el diagnóstico profesional.
Tras un primer contacto y la valoración del estado de tu estructura gingival, el dentista te recomendará una profilaxis dental. Este paso es crucial para eliminar la placa bacteriana acumulada.
Si la enfermedad está en su primera fase y tu diagnóstico es gingivitis, tendrás que seguir las pautas y rutinas que te dictamine el dentista. Con un mantenimiento adecuado, lograrás controlarla y mantener un estado bucodental óptimo.
Si la enfermedad periodontal se encuentra en estadios superiores y la gingivitis ha derivado en una periodontitis, el tratamiento es más intensivo y dirigido a la conservación de las piezas dentales. En estos casos, evitar la pérdida de los dientes a través de la odontología conservadora es prioritario.
Aunque siempre mantener tus dientes naturales es la primera opción, hay ocasiones en las que la pieza es insalvable. En estos casos, la implantología avanzada devolverá la funcionalidad y estética a tu sonrisa. Todo tiene solución en las manos adecuadas.
Consejos para reducir tus visitas al implantólogo y controlar la gingivitis
Las revisiones periódicas y las rutinas de higiene dental serán tus aliados para cuidar tu boca. Mantener controlada la enfermedad gingival es relativamente sencillo si además de realizar las revisiones dentales correspondientes, sigues las pautas de higiene bucodental e indicaciones recomendadas por tu dentista.
Te damos algunas ideas que te ayudarán en el propósito. ¡Presta atención!
- Cepíllate los dientes tras cada comida. Tras las comidas es necesario que te cepilles dientes y encías con un dentífrico específico para encías delicadas y sensibles. También te recomendamos utilizar, una vez al día, seda dental o cepillos interdentales y un colutorio adaptado a tus necesidades.
- Elige artículos de limpieza oral adecuados y úsalos con efectividad. Elegir un cepillo de dientes con una dureza óptima, ya sea manual o eléctrico, es la clave del éxito del proceso. Cepíllate con movimientos circulares y transversales, no presiones demasiado e incide en la zona de unión entre el diente y la encía.
- Renueva tu cepillo dental con regularidad. La eficacia de un cepillo de dientes mantiene una relación directa con su tiempo de uso. Por ello, te recomendamos desechar el cepillo tras tres o cuatro meses.
Aunque el mejor remedio para cualquier enfermedad dental es la prevención, si cuidas tus encías y eres constante con las recomendaciones, mejorarás tus problemas y controlarás su avance.
La importancia de acudir a las revisiones con tu dentista
Solo en una revisión dental, podrás obtener un diagnóstico fiable de tu estado bucodental. Si padeces gingivitis, es una profilaxis profesional la que eliminará la placa bacteriana causante de los incómodos síntomas que dañan tus encías.
El dentista es el único especialista que pueda diagnosticar tus síntomas y aplicarte un tratamiento personalizado. En las revisiones valoran el estado de tu boca, hacen las pruebas pertinentes ajustadas a tu historial clínico y te ayudan a controlar cualquier enfermedad oral.
La prevención y el control te ayudan a salvar piezas dentales dañadas y a mejorar el estado bucodental en general. No dejes pasar tus controles, asegura la salud de tu sonrisa.
¿Cómo son las revisiones bucodentales cuando tengo gingivitis?
Cuando padeces gingivitis, con una limpieza dental profesional, unas pautas específicas de higiene oral y las revisiones periódicas a tu dentista, garantizas las medidas básicas suficientes para mantener la enfermedad controlada.
El secreto está en la prevención y la rapidez de actuación. En tu revisión valoramos una serie de puntos básicos para comprobar que todo avanza en la buena dirección.
Una vez realizada una exploración previa, elaborado el diagnóstico de tu estado periodontal y valorado tu historial clínico, se realiza una evaluación radiográfica. Cuando el odontólogo constate el estado de tus piezas dentales, se aplica un tratamiento desinflamatorio y de higienización profesional.
La limpieza dental tiene una duración aproximada de una hora y con ella se eliminará la placa bacteriana y el sarro adherido a la encía y a las piezas dentales. Durante la profilaxis se aplican técnicas de higiene y se recurre al uso de ultrasonidos y curetas para eliminar el sarro.
También se usa la seda dental y se realiza un pulido con pasta de profilaxis y tiras interproximales con el objetivo de mejorar la limpieza interdental y eliminar el manchado. Finalmente, se aplica flúor para reforzar la dentadura.
Fase de control
Una vez superada la fase de higienización, tras 30 días, debes realizar una revisión de control con tu odontólogo. Comprobar la evolución del tratamiento y el estado de las encías es la manera más eficaz de prevenir y controlar la gingivitis.
Además, debes seguir las recomendaciones en materia de higiene oral y realizar revisiones periodontales, normalmente cada 12 meses. Evitar la progresión de la enfermedad y mantener controlados sus síntomas es clave para poder disfrutar de un estado bucodental saludable.
Ponerte en manos de un buen profesional especializado garantiza que en cada revisión las exploraciones sean rigurosas. El diagnóstico debe sustentar soluciones adaptadas a tus necesidades concretas.
Un diagnóstico completo debe valorar el estado de las mucosas y de los tejidos periodontales, el estado de los dientes y el grado de oclusión dental.
Confía tu salud oral a un equipo cualificado. ¡Mantén a raya la gingivitis!
Odontología conservadora. Nuestra prioridad, salvar tu diente
Las técnicas preventivas en este tipo de casos son poco invasivas, sencillas y muy efectivas. Conservar una sonrisa saludable y natural es la base de la odontología conservadora. Salvar los dientes naturales es la prioridad. Para ello, lo ideal es recurrir a la experiencia de un equipo odontológico especializado.
Si la gingivitis te preocupa, en Julián Saiz Clínica Dental te ofrecemos soluciones adaptadas a tu caso de la mano de un equipo de profesionales especializados y con años de experiencia. Pide tu cita con nosotros, te asesoraremos sin ningún tipo de compromiso.